Dr. Martín López Amézquita1
1Pediatra Neonatólogo Capítulo Salamanca
Bol Cient Cult Col Ped Gto 2023;1(2):50-51
¿Por qué los hombres dejan de ser niños?………..
Esta es una de las preguntas que se exponen en este libro, cuya primera edición se publicó en 1974. Desde sus primeras páginas nos deja más que claro que, aunque parece un libro infantil, en realidad tiene un mensaje para todas las edades y personalidades, desde la persona más inocente como lo es un niño hasta el hombre más sabio y de mayor conocimiento como lo es su personaje principal…. un alquimista.
Ruy Pérez Tamayo fue un destacado mexicano Tamaulipeco (1924-2022), médico patólogo-inmunólogo apasionado por el conocimiento y el origen de las cosas. Publicó más de 150 artículos científicos en revistas nacionales e internacionales; escribió 64 libros, 18 de ellos acerca de temas científicos y 46 ensayos históricos, siendo “ el viejo alquimista” uno de los que expresa su gran interés por el entendimiento de la naturaleza y la búsqueda de la verdad que lleva a la felicidad.
Entre los mensajes más destacados de este libro es que a veces es bueno recordar lecturas de la infancia que nos hacen reflexionar sobre lo que somos y no solo lecturas que nos hacen creer que somos mayores.
Cada capítulo está lleno de frases que nos hacen analizar que la existencia de las cosas depende de lo que percibimos con nuestros sentidos, para que al unir las percepciones creemos la idea de un objeto en nuestra mente. Este entendimiento del ser humano, no solo nos hace obtener un conocimiento, si no que nos lleva a experimentar para descubrir la verdad.
El personaje principal combina la ciencia, el arte y lo espiritual, descubriendo que nuestras acciones no siempre nos llevan a concluir un objetivo, si no que durante la ejecución descubrimos el verdadero sentido de la vida.
Nos hace reflexionar sobre ¿por qué trabajamos?, ¿cuál es nuestra motivación? Y sobre si el contenido de nuestro trabajo hace que enfoquemos nuestros conocimientos en encontrar la verdad o solo resolver problemas, lo cual al final nos lleva a ser más ambiciosos e infelices ya que “el hombre es incapaz de aceptar sus limitaciones humanas”.
Como comenté, este libro es para todos sin importar el conocimiento, ya que te hace entender que hay muchas cosas que la ciencia no estudia, como los sentimientos, haciéndonos ver que “la mejor solución para el amor es el propio amor”, que somos imperfectos y que estamos en este mundo para tratar de corregir nuestras imperfecciones.