RESEÑA DEL LIBRO

“PRIMERO, LOS NIÑOS. MEMORIAS DE UN CIRUJANO DESDE LAS FRONTERAS DE LA MEDICINA PEDIÁTRICA” KURT NEWMAN

Dr. Martín López Amézquita1

1Pediatra Neonatólogo Capítulo Salamanca

Bol Cient Cult Col Ped Gto 2023;1(1):62-63

Todos los médicos tenemos una anécdota que contar de nuestra formación y práctica, historias buenas y otras no tanto, que nos formaron como lo que hoy somos, que a muchos nos hicieron tomar la decisión de hacia dónde dirigir nuestra práctica médica y que nos siguen inspirando a seguir este camino aportando día a día algo a la sociedad.  El libro “Primero, los niños. Memorias de un cirujano desde las fronteras de la medicina pediátrica” escrito por el doctor Kurt Newman, es considerado Best Seller en Estados Unidos y en el mundo. En este libro, el autor comparte sus experiencias como médico, no solo a nivel profesional, sino que nos describe cómo aprendió a ver más allá del aspecto clínico, cómo las circunstancias de cada paciente y su forma de vivir la enfermedad le hicieron darse cuenta que la medicina no solo es ciencia, práctica y experiencia, sino  también es una oportunidad de concer al paciente y su familia para abordar desde un punto distinto la enfermedad, ya que lo que puede funcionarle a un paciente, puede que a otro no, pues el éxito de un tratamiento no solo depende de la respuesta biológica del paciente, sino también de la respuesta  emocional, del estado de ánimo y actitud de él y su familia.

Cualquiera que ha trabajado con niños, sabe la  gran fortaleza física que ellos tienen, lo que los lleva a recuperase más rápido de lo que lo haría un adulto, sin embargo, también sabemos los suceptibles que pueden ser emocionalmente al entorno, a nuestras palabras, expresiones e incluso a nuestra mirada.

Cuando estamos ante un niño enfermo, muchas veces olvidamos cómo   se  siente    él    y    su  familia, omitiendo considerarlos para la toma de decisiones.  En las páginas de este libro, el personal médico se podrá identificar con alguna o muchas de las historias, especialmente, nosostros como pediatras, nos muestra una perspectiva distinta de lo mucho que podemos aportar a la mejora continua de la atención de los niños, especialmente en nuestro país, ya que la salud no solo es biológica sino tambien espiritual.

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