Dra. Guadalupe Gómez Rodríguez1
1Pediatra neonatóloga UMAE HGOP #48 IMSS León, Capítulo León
Bol Cient Cult Col Ped Gto 2024;2(2):14-15
La enterocolitis necrosante (ECN) sigue siendo enigmática y devastadora, es la causa más frecuente de enfermedad gastrointestinal adquirida y emergencia quirúrgica en el neonato; afecta predominantemente a prematuros con muy bajo peso al nacer. Se reporta una incidencia del 5-15%. La patogénesis es multifactorial y aún no está claramente definida. La mortalidad continúa siendo elevada y varía del 20 al 50%, dependiendo de la gravedad de la ECN y la edad gestacional del neonato. A pesar de la naturaleza compleja y multifactorial de la patogénesis de la ECN, tres factores de riesgo principales han sido implicados en su desarrollo: prematurez, colonización bacteriana del intestino y la fórmula de alimentación. Aunque las radiografías simples carecen de la sensibilidad y la especificidad para detectar isquemia intestinal o necrosis, los datos recientes sugieren que el ultrasonido puede ser de utilidad en este sentido.
El ultrasonido ofrece algunas ventajas potenciales sobre las placas simples, ya que puede mostrar el grosor de la pared intestinal y la ecogenicidad, las colecciones de fluidos focales, el peristaltismo y la ausencia de perfusión de la pared intestinal utilizando imágenes Doppler. Sería importante implementarlo como método diagnóstico en todos los casos para toma de decisiones en tratamiento médico y quirúrgico.
En lo personal siempre me ha generado incertidumbre y preocupación al manejar a estos pacientes como neonatóloga, el retraso en el manejo quirúrgico puede terminar en un desenlace fatal o en un intestino corto ocasionando una mala calidad de vida de estos prematuros. Esto nos motivo a la realización de este estudio: sería importante implementar el ultrasonido abdominal como método diagnóstico en todos los casos para toma de decisiones oportunas en el tratamiento médico y quirúrgico de la enterocolitis necrosante.