“EL MÉDICO” DE LUKE FILDES

Dra. Mariel Guevara Ramírez1, Dr. Arturo Vargas Origel2

1Pediatra Neonatólogo Capítulo Salamanca,

2Pediatra Neonatólogo Capítulo León

Bol Cient Cult Col Ped Gto 2023;1(2):53-54

Luke Fildes, nacido en el año de 1844 en Liverpool, Inglaterra, fue un pintor de la época victoriana, principalmente vinculado con la corriente realista.

Se relata que, en la navidad del año 1877, el hijo mayor de Luke Fildes, Phillip, a pesar de las atenciones del Doctor Gustav Murray, murió de tuberculosis. Fildes impresionado por la devoción mostrada por el Dr. Murray, 10 años más tarde, realizó la pintura de un médico de familia que se mantenía en vigilia junto a la cama de un niño gravemente enfermo, esto lo decidió para rendir homenaje a la profesión, lo que dio como resultado la pintura llamada “el médico”. (Fig. 1).  

En esta, se pude observar una casa humilde, la cama donde reposa la niña,  dos  sillas  y  la  lámpara de la izquierda que ilumina a los personajes principales, el médico y el paciente, por detrás este, el padre de pie, con una mano sobre el hombro de la madre, quien tiene abatida la cabeza y las manos como si rezara; junto a ellos hay otra luz, la del amanecer a través de la ventana que, de acuerdo con Fildes, anuncia el inicio de la recuperación de la niña. El rostro del doctor, que es un autorretrato del artista, tiene el ceño fruncido, pensativo, la mirada atenta al paciente, la mano sostiene el mentón, quizá pensando si no se le ha escapado un detalle o un diagnóstico de la enfermedad, seguramente una enfermedad infecciosa con poco o ningún tratamiento para ese tiempo. En la mesa, junto a la lámpara, hay un frasco con medicina, una taza y cuchara; a la cabeza de la niña, para quien usó como modelo a sus otros dos hijos, hay una jarra y un recipiente con algo que parece un mortero o quizá sólo sea un recipiente con agua para disminuir la temperatura.

Esta pintura es una de las mejores representaciones entre el arte y la medicina, en donde podemos observar con claridad la relación médico- paciente, así como nos recuerda la importancia de la empatía y el compromiso del médico hacia la salud del paciente, pero, sobre todo, lo que podemos observar es la confianza que recibe el médico para mejorar la salud del enfermo. Considero que es estos tiempos, donde lamentablemente la población ha denigrado el gremio médico por diversas causas, y en varios colegas se ha perdido esa humanidad tan característica de esta profesión, en donde no solo es importante cuidar la integridad y salud del paciente, sino también su entorno familiar.

Nuestro deber como médicos, es recobrar la confianza de la población hacia nuestro gremio, mejorar las condiciones de salud, ya que con el tiempo la historia natural de las enfermedades ha ido cambiado, y realmente en estos últimos años, en donde a nivel mundial se sufrió una pandemia, la cual tuvo repercusiones importantes en la salud de la población, a pesar de los avances de la ciencia, no se puede comparar con la atención personalizada del médico hacia su paciente y su familia, nada puede reemplazar la empatía, la comunicación ni el interés genuino del médico por su paciente. Por eso cada vez que perdamos el camino, y nos encontremos absortos por un sistema salud, en donde la sobrecarga de trabajo sobrepasa nuestra capacidad humana, siendo más importante la cantidad y no la calidad, volvamos a ver esta pintura, “el médico”, y nos recordara el porqué de nuestra hermosa profesión.

“La medicina es la más humana de las artes, la más artística de la ciencia, la más científica de las humanidades”. E. Pellegrino, 1990.

Referencias:

  1. Vargas- Origel A, Campos Macías P. El Médico de Sir Lukes Fildes. Dermatología Revista Mexicana. 2017. Julio; 61(4):343-344.
  2. Rvi Shankar P, Morgan H. The Doctor. Academic Medicine, 2012; 87(3)
  3.  Michael-Barilan Y. The Doctor by Luke Fildes: An Icon in Context. J Med Humanit. 2007; 28:59-80
  4. Friedlaender LK, Friedlaender G. Clinical Orthopaedics and Related Research. 2015; 473(11): 3355-3359
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